jueves, 18 de junio de 2009

Las miserias de River y la AFA apuntaron a Maradona

La impertérrita caradurez de la dirigencia de River encabezada por José María Aguilar apuntó en esta oportunidad contra Diego Maradona, técnico del seleccionado nacional, que en la previa del encuentro por Eliminatorias ante Colombia se quejó del pésimo estado del campo de juego del Monumental. Entonces, el último martes en la reunión de Comité Ejecutivo desarrollada en la sede imperial de Viamonte 1366, el titular de la entidad de Núñez le envió dos cartas a Julio Grondona, pope de la AFA. En una se quejaba por los dichos de Diego en referencia al piso sobre el que debió disputarse el encuentro ante el elenco cafetero y en la otra, absolutamente desatinada y fuera de tiempo, cuestionaba la salud mental del entrenador y preguntaba por sus honorarios.

En la previa del choque ante los colombianos, Diego utilizó la mejor metáfora futbolera al referirse al campo de juego del estadio de River como un potrero, si se tiene en cuenta el estado en que se encontraba el terreno para un partido de Eliminatorias con destacados jugadores. Julio Macchi, vicepresidente riverplatense, aseguró que la institución se sintió agraviada por los dichos de Maradona. De esto modo, la dirigencia que más agravió la riquísima historia del club, pretendió ponerse como victima en lugar de reconocer que efectivamente la cancha estaba en malas condiciones. Diego se refirió a un elemento condicionante de su trabajo, pero bien podría agregarse el maltrecho estado general del Monumental, algo de lo que cualquier espectador puede dar cuenta. Sin embargo, al parecer la CD millonaria cree que su estadio está a la altura del Santiago Bernabeu o el Giuseppe Meazza.

Aguilar y su séquito fueron incluso más allá al exigir en la segunda misiva un examen psicofísico para Maradona, en un miserable golpe bajo aludiendo a su pasada enfermedad de adicción a la cocaína, y pidir detalles sobre sus honorarios. Agachan la cabeza sumisamente ante la propina que mediante la AFA les otorga la empresa propietaria de los derechos de televización en lugar de hacer valer ese capital, le relegan a un empresario amigo a Gonzalo Higuaín, a otros un combo de juveniles a precio de saldo y dibujan los balances, pero ahora buscan mostrarse firmes y preocupados por el salario del técnico nacional, pese a que está en el cargo hace más de siete meses y a que no debe estar ni entre los 20 entrenadores mejores pagos a nivel seleccionados nacionales.

La AFA, una vez más, puso una piedra en el camino de Maradona primero al disputar de todos modos el partido en el Monumental en lugar de trasladarlo no ya al interior -que parece no ser Argentina cuando se habla de la Selección-, sino al menos al José Amalfitani, y más tarde al darle lugar al reclamo de la dirctiva de River. La AFA alega que el Monumental es el único estadio habilitado desde la FIFA para disputar las Eliminatorias. ¿No puede el vicepresidente segundo del mundo conseguir el permiso para jugar en otro escenario? Claro que sí, pero por su aforo el estadio de River es el que mejor se ajusta al negocio de las entradas otorgadas a los patrocinadores. El protocolo debería ser algo limitado, pero en cada partido de la Selección se entregan a esas empresas más de 10.000 tickets. Grondona siempre dijo que no se podía salir de Núñez, pero ahora asegura que cometió un error y por eso pedirá autorización a sus amigos de Suiza para jugar ante Brasil en el Gigante de Arroyito.

El mandamás pretendió, al otro día de la presentación de las cartas de Aguilar, bajarle el tono a la cuestión al sentenciar que se trataba de una disputa de fanatismo superclásico y calificó a Maradona de partidario ferviente de Boca Juniors, asegurando así que opinó como un hincha con gorro, bandera y bincha xeneixe y no como lo que es, el entrenador del equipo nacional.

De esta dirigencia de River y de la eterna conducción de la AFA nunca se puede esperar nada bueno, y si actúan en conjunto lo que devenga seguramente será nefasto. De hecho siempre operan en tándem, ya que todas las irregularidades en River fueron avaladas desde la AFA. Por eso no fue de extrañar que Grondona diera lugar al reclamo de River y pidiese disculpas, desacreditando la justa queja de Maradona y varios jugadores. Tal vez el otrora ferretero logre con todos los técnicos de talla lo mismo que ya consiguió con Bianchi, de modo tal que ninguno quiera hacerse cargo de la Selección estando él de por medio
(Foto: Elpotrero.com.ar)

Patricio Insua
patinsua@gmail.com

2 comentarios:

javier dijo...

la defensa de river es atacar a los demás, porque del estado de la cancha no dijeron nada. es una de las pocas peleas donde me cuesta pornerme de uno de los dos lados, si que hay que hacerlo

Fernando Salceda dijo...

La gestión de Aguilar en River es una de las muestras más palmarias de lo que significa el "Grondonismo" para el fútbol argentino.
Con gente como esta, no podemos pretender que nos vaya de ninguna otra manera que no sea mal.

Un abrazo.